A propósito del 14-A

Desde la pasada campaña para las elecciones presidenciales del 7 de Octubre, vengo escuchando frases como: “Le estoy agradecida porque gracias a él tengo mi casa”; “Ahora los viejitos tenemos pensión”; “Él hizo muchas cosas buenas”; entre otra gran cantidad de estupideces.

Según la cultura, estudios y experiencia que tengo, todo gobernante debe asegurar la mejora de una alcaldía, región o nación y automáticamente de su población. En otras palabras, esa es su obligación.

Por ende, eso que llaman “Revolución”, no es nada del otro mundo. Que los gobernantes de los cuarenta años del puntofijismo, hayan o no hecho algo es otra historia.

La famosa “Revolución” en realidad no ha hecho nada bueno. En vez de repotenciar o hacer buenos hospitales hizo unos módulos llamados Barrio Adentro y los no menos famosos Centro de Diagnóstico Integral o Barrio Adentro II. Por cierto, ningún “revolucionario” (de los que está en el Gobierno) va a esos lugares. Prefiere ir a una clínica privada (de las más costosas y que tanto atacan) o irse a una institución médica en el extranjero.

Pero ejemplos como éste hay muchos, así que retomemos la idea del texto: las vitales elecciones del venidero 14 de abril.

También sigo escuchando las benditas frases: “ser rico es malo”, “abajo el Imperio”, “gracias a la ‘Revolución’ somos libres” y otra cantidad de pajuatadas.

Sí, es cierto, ser rico es malo pero para el vecino, el portugués del abasto de la esquina, el jefe de uno, etc. Personas que por cierto llevan 20 años o casi toda su vida matándose para tener lo que tienen y vivir como viven. Algunos con educación mientras que otros sólo con el sudor de su frente.

No para los camaradas “revolucionarios” que mientras la población venezolana (incluyendo personas preparadas y con más de 30 años) está literalmente en la quiebra y sólo con dinero para las necesidades básicas y uno que otro rubro, ellos sí pueden vivir como los ricos sin serlos (o al menos llegaron al poder sin un medio en el bolsillo). Lo peor de todo no es eso, sino el apoyo del electorado chavista.

¿Libres de quién o de qué? Del capitalismo no será, mas capitalistas que los “revolucionarios” nadie. Libres será de las antiguas naciones colonizadoras porque del Gobierno de Cuba, nada de nada. Ah, para los chavistas aquí no hay cubanos ni injerencia de dicha nación isleña.

Retomando la idea del texto, ¿por qué si ellos sabían que Chávez estaba tan enfermo y que podía morir decidieron lanzarlo a unas elecciones tramposas? Señores, eso no se le hace al país donde se nace y mucho menos al que se dice hasta la saciedad que se ama.

En lo personal prefiero que no lo amen. No me quiero imaginar cómo sería si lo odiarán.

Ahora tenemos a otro “mesías”, sí, me refiero al tal Nicolás Maduro. Un sujeto que Chávez sólo escogió por su apego a la “Revolución” y a la izquierda. Hay quienes aseguran que fue por directrices de los hermanos Castro.

En fin, por más que lo quieran justificar, Maduro no tiene la preparación para dirigir una nación ni mejorar la situación política, social y económica que vivimos actualmente en Venezuela. Ahora, él sí está super preparado pero para seguir mintiendo, traicionando y destruyendo al país. (aún debe una explicación seria sobre la muerte de su “Padre”)

El sujeto está tan mal preparado, que sólo imita a Chávez. Bueno, en realidad no lo imita, intenta hacerlo pero le queda pésimo. Desde la supuesta muerte del “Comandante Supremo” no ha hecho más que lanzar discursos de odio, tanto al pueblo venezolano que adversa su “Revolución Bonita” así como a pueblos extranjeros que no comparten su proyecto.

Todas las supuestas joyas que eran las que gobernaban y hacían todo mal de lo cual Chávez no tenía la culpa, son quienes desde diciembre 2012 nos están mal gobernando y los chavistas los están apoyando como imbéciles.

¡Allá cada quien con su conciencia! Según como luce el panorama, los pasados 14 años serán un paraíso fiscal y terrenal en comparación con el futuro gobierno rojo que se viene.

En la “Revolución” y en la población están más que convencidos que ganarán e incluso con más votos que en el fatídico 7 de Octubre. Primero deben ganar y luego celebrar.

Este domingo 14 de abril es hora de cambiar de cuaderno y escribir una nueva historia republicana y en democracia.